lunes, 14 de diciembre de 2015

UNA ARAGONESA EN BELÉN


BELÉN EN LA ACTUALIDAD
Como se acerca la Navidad he pensado que nada mejor que contar como es la localidad de Belén en los tiempos actuales.
  Nada de arroyos, montañas nevadas, campos verdes con alfareros,lavanderas y labradores...Y otros varios de los elementos de nuestros belenes.
  Belén es una ciudad que se encuentra en los territorios palestinos a unos 5 o 6 km de Jerusalen, aunque el país, por el momento, al que pertenece es Israel. Goza, como todo Palestina de una gran autonomía.
  En la foto podemos ver la plaza mayor o de la Estrella y al fondo su correspondiente mezquita.
  La mayoría son musulmanes, pero hay una pequeña colonia de cristianos, entre católicos y ortodoxos. La basílica de la Natividad se encuentra a unos 200m de la plaza de la Estrella y está regentada por los cristianos ortodoxos. Los padres franciscanos desde tiempos remotos son los custodios de los Santos Lugares en Israel. Todas las basílicas de Tierra Santa, son propiedad de la iglesia católica y ortodoxa y dado que estas religiones son minoritarias allí, los terrenos en los que se asientan, fueron comprados y vallados y ahora son como islas en medio del mar musulmán. El guía, obligatoriamente palestino, pero de religión católica, nos contó que los cristianos en este siglo son una minoría, dado que están marginados por no seguir la norma general. Han ido perdiendo poder y han emigrado, sobre todo a EEUU. Como no tenían trabajo, los franciscanos los instruyeron, ya en el siglo pasado, en el trabajo de la madera y ahora con madera de olivo y manualmente construyen rosarios, belenes y todo tipo de recuerdos religiosos. También regentan los pocos hoteles y restaurantes dedicados a los peregrinos cristianos que logran reclutar los franciscanos.
Dadas las innumerables intifadas o entifadas, el gobierno israelí está construyendo un enorme muro que tendrá  al finalizar 700 km.que los palestinos tratan de hacer más llevadero pintando en él grafittis y otras imágenes, que separa Jesuralén de Belén u otros territorios palestinos y que tuvimos que atravesar no sin antes ser visitados, dentro del autobús, por el ejército e inspeccionados. También, allí mismo, cambiamos de guía, pues también los palestinos quieren tener sus propios trabajos. Cada vez que hay intifada las pérdidas por turismo son inconmensurables y eso hace que los cristianos desciendan de año en año pues es a ellos a los que más afecta.

imagen actual con el muro al fondo

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