¿Cómo sería en realidad? Cuando ella vivió la fotografía estaba en pañales.
Por ser amiga de diversiones,
porque fue alegre su juventud,
en copla se vio la Dolores,
la flor de Calatayud,
y una coplica recorre España,
pregón de infamia de una mujer
Y aquel nombre de aquella maña,
yo tengo que defender....
Si vas a Calatayud,
pregunta por la Dolores
que una copla la mató
de vergüenza y sinsabores
Pues, cuando yo era niña, de eso hace ya unos pocos o muchos años, que a nadie se le ocurriera preguntar en Calatayud por la Dolores, pues era sinónimo de preguntar por la prostituta del lugar. Y dada la sorna con la que se preguntaba, se suponía que podía ser cualquiera de nosotras las mujeres. Teniámos la siguiente consigna para responder a tal pregunta:
- Pregunta en tu casa que seguro que la encuentras.
¡ Mujeres recias las de nuestra tierra. Bromas las precisas!
Pero he aquí que hace ya unos años, creo que con la restauración del Mesón de la Dolores, empezó a estudiarse la verdadera historia . Un redactor de Calatayud y escritor llamado Antonio Sánchez Portero, tras seguir las huellas de esta mujer escribió un libro titulado: " La Dolores, un misterio descifrado" y ha contribuído a contar la verdadera historia de esta Dolores en la que se mezclan la realidad y la ficción.
Escudo de la muy augusta ciudad bilbilitana de Calatayud
VERDADERA HISTORIA
María de los Dolores Peinador Narvión nació el 13 de Mayo de 1819 en Calatayud, siendo bautizada en la iglesia de S. Juan el Real . Hija de un militar gallego D. Blas Peinador y de una acaudalada mujer bilbilitana llamada Delfina Manuela.
Cuando contaba Dolores 6 años, su padre, ya militar retirado, fue nombrado alcalde mayor de Daroca, de allí su vinculación con dicha ciudad. Pero en 1827 muere Delfina dejando un gran patrimonio (en tiempos actuales serian como 100 millones de Euros). Su padre vuelve a casarse y es nombrado alcalde mayor de Gerona donde se traslada a vivir y olvida a los hijos de su primer matrimonio.
Dolores, ya mocita, conoce a otro militar, andaluz, destinado en Daroca, posiblemente en un destacamento de las guerras carlistas y se casa en secreto en Zaragoza. Él se llama Esteban Tovar, pero parece que está más interesado en el dinero de su esposa que en su amor por ella y gastan mucho "parné" por lo que reclaman al padre la herencia materna.Tanto el padre como la madrastra, no aceptan el matrimonio de Dolores por lo que se niegan a ceder la herencia. Esto lleva al matrimonio a litigar con su padre y conseguir lo que les pertenece.
Tienen varios hijos nacidos en Calatayud y se arruinan totalmente dada la vida disipada que llevan y se trasladan a vivir a Madrid donde nace su último hijo. Muere su marido en Madrid y ella le sobrevive hasta el año 1894 en el que muere y es enterrada en el cementerio de la Almudena.
Se sabe que era muy bella y que quizá el despecho de algún enamorado y no correspondido pudo llevarle a pregonar leyendas sobre ella, pues se sabe, que no llevó, por cierto, una vida tranquila.
Patio interior con el pozo original
Vista actual de la cafetería donde se conservan las anillas para guardar los asnos y otros animales con los que los viajeros se hospedaban.
Pero con el paso de los tiempos en Calatayud hemos comprendido que los mitos hay que destacarlos y no ocultarlos. Se restauró el mesón donde la leyenda la ubica trabajando (y que yo de niña lo recuerdo en una situación deplorable) y se ha convertido en un hotel con encanto donde la restauración ha quedado genial y en los bajos, el museo de la Dolores, cuyo primer presidente e impulsor fue Antonio Sánchez Portero.
Fachada exterior con la puerta principal y la entrada a tienda de vinos y souvenir.
Ahora estamos orgullosos de que el nombre de Calatayud sea conocido universalmente por las zarzuelas, óperas, composiciones, libros etc que de ella se han hecho.
¡BENDITA DOLORES. LO QUE TE DEBEMOS EN CALATAYUD!
Y hasta le hemos dedicado una rotonda y una hermosa estatua da fe de que su pueblo no la ha olvidado ni la olvidará jamás.
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